Ayer tocaba que fuera un gran día. Tras llevar a Turbotín a revisar, y pasar todo "con nota", lo recogíamos, y nos íbamos por la sierra madrileña a reconocer los tramos para la próxima quedada de finales de Julio. Disfrutábamos como enanos encontrando algunas de las carreteras más impresionantes que hemos visto en mucho tiempo, con vistas de quitar el hipo, con curvas inolvidables... y todo ello con unos nuevos Pilot Sport 3 calzados en las llantas de "Turbotín", los que se agarraban como auténtico pegamento al asfalto, haciéndome recordar por qué no me gustan las Pirelli de serie.
Daban las tres de la tarde, y en un pueblecito de la sierra, a medio trayecto de nuestra ruta, Sergio (mi cámara que ya conocéis de otras ocasiones) y un servidor decidíamos parar a comer unos buenos huevos fritos, con lomo y patatas.
Con la barriga llena, y deseosos de seguir descubriendo carreteras y preparando la gran concentración madrileña, bajábamos a recoger el Abarth a donde lo habíamos dejado aparcado.
Abría el coche con el mando sin mayor problema, metía la llave en el contacto, giraba y... nada de nada.
Así comenzaba una tarde perdida de lo más curiosa. Al coche, al parecer, le fallaba el inmovilizador anti-robo, que no se entendía con la llave (algo bastante común en los coches de hoy en día), así que sin mayor problema mecánico, nos quedábamos con el coche inmovilizado (el inmovilizador funciona con ganas de verdad...).
Llamábamos a la grúa, y perdíamos la tarde entera, entre unas cosas y otras, para dejar el coche en el taller. Al llegar a él, los mecánicos ya se habían ido, y hasta hoy no van a poder hacerle nada (que por cierto, de momento tampoco tengo noticias de cómo está el coche).
Eso sí, la gente de garantías de Fiat actuó competentemente, me ofrecieron un coche de sustitución y a lo largo de esta mañana me han llamado para preguntarme si había tenido algún problema.
La chica que nos atendió en carretera fue muy agradable, y actuó rápida y concienzudamente, y sólo nos podemos quejar un poco de lo que tardó en llegar la grúa hasta el vehículo (casi dos horas...).
En fin, de momento poco más os puedo contar, mientras no sepa concretamente lo que le pasó al coche ni cuando quedará resuelto. A priori, siendo una tontería como esta, debería quedar solucionada hoy mismo, pero... Os mantendré informados ;)
A mi me suele pasar algo parecido (no siempre) con mi Fiat Punto, no se si sera lo mismo que lo vuestro, en ocasiones voy a arrancar y el piloto del cuadro (Un candado con un coche) se queda encendido y aunque el motor de arranque puede girar no arranca el vehiculo, mi truco es sacar la llave y pasarla por la parte baja de la columna de la dirección, la meto de nuevo en el contacto y ya esta, listo para disfrutar.
ResponderEliminarQue susto me habeis dado al ver a Turbotin subido en la chepa de la grua, pero bueno esas pijadillas del inmovilizador suelen pasar. A ver si podeis seguir disfrutando hoy de el, saludos!!.