Abarth es distinta

¿Qué hace a Abarth distinta respecto a otras marcas? Muchas veces nos lo preguntamos, pero generalmente llegamos a la misma conclusión. El cliente real, el cliente objetivo de Abarth es el apasionado del mundo del motor, que busca pasión, diseño diversión... y todo con un precio contenido.

Si eres un afortunado, tu Abarth será tu segundo coche, porque tendrás un deportivo más grande en casa. Si no "manejas tanto", el Abarth será tu opción por ser un coche que perfectamente te vale para todo, sin sacrificar la pasión y las prestaciones.

Abarth es especial. Es una marca en sí misma, con una identidad propia, basada en la pasión por el mundo de los coches, las carreras... En un evento de Abarth, en una reunión de aficionados a la marca "de los de verdad" no se habla de otra cosa que no sean coches. Y esa es la diferencia.

Es una marca de "petrolheads" para "petrolheads". De gente que gusta del mundo de los coches por encima de todo. Abarth no es una marca que necesite que un futbolista de campanillas conduzca uno de sus coches para ganar imagen de marca. No necesita clientes que compren el coche sólo por su aspecto o por ser guays.

Un Abarth te lo compras porque te gusta, y sobre todo, porque el producto es genial en sí mismo. Puede que los haya más rápidos, más efectivos, pero adquirir un Abarth es comprar un cachito de historia, una forma de entender el mundo del automóvil y formar parte de él. Es un pasaporte a poder formar parte de una familia reducida, pequeña, pero muy unida, donde se comparten experiencias, afición y eventos. Un Abarth es algo más que un coche, vivir Abarth es algo más que vivir el propio modelo, es disfrutarlo y sentirlo, descubrir cada detalle de su historia, reencontrarte cada momento con la diversión de conducción.

Y cuando te juntas con gente que de esto sabe mucho desde hace muchos años te das cuenta de lo afortunados que somos de trabajar con esta marca, que nos permite ser pasionales y apasionados por el mundo del motor, y no frívolos facturadores de electrodomésticos de transporte. Porque la pasión, el alma, va incluida en el producto y en todo lo que le acompaña.

Es lo que nos hace diferentes, ¿qué más quieres?